Hoy es una tarde de domingo extraña. Por alguno de esos milagros que ocurren de vez en cuando, la selección española ha conseguido llegar a una final, en este caso la Copa de Europa. Como buen país de futboleros, todos están pendientes del televisor en los bares, en sus casas, en casas de sus colegas... Las calles están vacías, silenciosas; de vez en cuando pasa un coche, eso sí, pitando como un energúmeno, como si ya hubiera algo que celebrar. No quiero imaginarme qué pasará esta noche si gana España. Aquí no va a dormir ni mi gata, que se duerme sin problemas en cualquier momento del día.
El caso es que yo no soy muy aficionada al deporte. A ningún deporte: lo mismo me da que se juegue con balones, con raquetas, con patines... que no me engancha.
Así que como en esta ocasión me veo "obligada" a ver el partidito de marras, me fijo en otras cosas menos deportivas. Por supuesto si ganamos me alegraré como la que más. Por cierto: GOOOOL. Ya suenan los petardos en la calle. Minuto 32, España 1 - 0 Alemania.
Pero vamos a las curiosidades y preguntas que me formulo cuando veo un partido de fútbol:
- Para empezar me pregunto por qué solo somos patriotas cuando se trata de defender a la selección. No nos avergonzamos de lucir con orgullo los colores de nuestra bandera nacional. Sin embargo, fuera de ese contexto, cuando se ve a alguien con una bandera española (en la ropa, en el coche, en el balcón...) en este país de locos lo llamamos "facha". Cosas de los españoles que somos un poco bipolares.
- No sé por qué todos los locutores deportivos tienen el mismo tonillo e incluso me atrevería a decir la misma voz. Se me clava en el cerebro sin remedio, no lo puedo evitar.
- Hablando de periodistas deportivos - esa raza aparte de periodistas pues siempre se ha dicho que el que no vale para periodismo serio se va a deportes - han inventado un lenguaje propio. Por ejemplo, cuando uno se lesiona dicen que se duele en lugar de que se queja o que le duele. ¿Para qué tantas palabras? Unamos varias en una. Los minutos que se añaden al final de cada parte son de descuento. Yo creía que eran de más, no de menos...
- ¿Por qué siempre que le hacen un primer plano a un jugador éste se saca un moco o escupe? Qué desagradable.
En fin, son tantas cosas las que no entiendo que la lista sería interminable. Voy a aprovechar el descanso del partido para cenar, no vaya a ser que me toque volver a gritar gol y me atragante con la tortilla.
De momento somos campeones, disfrutemos de ello por si acaso las cosas se tuercen en la segunda parte.
¿Podemos?
2 comentarios:
Poder pudimos jajaja. Deberías ejercido tu derecho constitucional a ver una película.
Yo también pensaba escribir un post sobre el partido, pero lo tuyo es irrebatible, chapeau...escribiré sobre la migración de la avutarda
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