Ayer por fin después de mucho tiempo me decidí a ir al cine. Si es que últimamente está la cartelera de un aburrido que echa para atrás. Y si hablamos de cine español ya ni qué decir. Que si no son de la guerra civil o algún rollo macarra o sexo explícito a tope ya no tienen temas.
Sin embargo fui a ver El Orfanato. Buscaba una peli de impacto que me hiciera olvidarme de esta semanita y del tipo que pegó a la inmigrante en el tren ¡qué coñazo por Dios! Que no digo yo que no esté muy mal lo que hizo pero se han cebado con el chaval a base de bien. La culpa de los políticos que ven votos en todas partes. Pero bueno, no me gusta hablar de política porque siempre conseguiré ponerme enemigos encima y no me apetece. Lo que opino me lo reservo.
A lo que vamos, EL ORFANATO. La típica película de casa encantada y muchos sustos hasta cuando no pasa nada, pero te meten la música a tantos decibelios que acabas con un mareo impresionante.
Mientras la veía pensaba que me alegro de vivir en un piso pequeño. Esas cosas nunca pasarán en un minipiso de esos de la ministra. A ver donde te vas a esconder, ¿debajo de la mesa del comedor? En un minipiso no hay puertas secretas, y tenemos la ventaja de que al ser tan pequeño no cabemos todos, fantasmas y humanos.
Siempre me pregunto porqué escogen vivir o montar hospitales o residencias en viejos caserones abandonados. Si por el mismo precio te puedes comprar un edificio nuevo donde no cruje el suelo de madera y hay mucha más luz natural, las lámparas no parpadean, las cañerías no tintinean y lo que es más importante, nadie ha sido cruelmente asesinado hace 40 años porque allí solo había un solar o un huerto de alcachofas.
Claro que a lo mejor solo lo pienso yo que soy muy cobarde y ni por todo el oro del mundo me quedo sola en una casona de 600 metros cuadrados a oscuras por la noche jugando al escondite con siete niños fantasmas que se ríen mientras intento dormir… Manías que tengo.
Pero al fin y al cabo la película cumple lo que promete y te da unos buenos sobresaltos mientras te mantiene en tensión durante hora y media. El final como siempre a libre imaginación, cada uno que piense lo que quiera y así todos contentos.
Si os gustan las películas de terror al estilo Hollywood sin recordar que cuando erais pequeños veíais a Belén Rueda bailando en el Vip Noche, El Orfanato es vuestra peli.
Sin embargo fui a ver El Orfanato. Buscaba una peli de impacto que me hiciera olvidarme de esta semanita y del tipo que pegó a la inmigrante en el tren ¡qué coñazo por Dios! Que no digo yo que no esté muy mal lo que hizo pero se han cebado con el chaval a base de bien. La culpa de los políticos que ven votos en todas partes. Pero bueno, no me gusta hablar de política porque siempre conseguiré ponerme enemigos encima y no me apetece. Lo que opino me lo reservo.
A lo que vamos, EL ORFANATO. La típica película de casa encantada y muchos sustos hasta cuando no pasa nada, pero te meten la música a tantos decibelios que acabas con un mareo impresionante.
Mientras la veía pensaba que me alegro de vivir en un piso pequeño. Esas cosas nunca pasarán en un minipiso de esos de la ministra. A ver donde te vas a esconder, ¿debajo de la mesa del comedor? En un minipiso no hay puertas secretas, y tenemos la ventaja de que al ser tan pequeño no cabemos todos, fantasmas y humanos.
Siempre me pregunto porqué escogen vivir o montar hospitales o residencias en viejos caserones abandonados. Si por el mismo precio te puedes comprar un edificio nuevo donde no cruje el suelo de madera y hay mucha más luz natural, las lámparas no parpadean, las cañerías no tintinean y lo que es más importante, nadie ha sido cruelmente asesinado hace 40 años porque allí solo había un solar o un huerto de alcachofas.
Claro que a lo mejor solo lo pienso yo que soy muy cobarde y ni por todo el oro del mundo me quedo sola en una casona de 600 metros cuadrados a oscuras por la noche jugando al escondite con siete niños fantasmas que se ríen mientras intento dormir… Manías que tengo.
Pero al fin y al cabo la película cumple lo que promete y te da unos buenos sobresaltos mientras te mantiene en tensión durante hora y media. El final como siempre a libre imaginación, cada uno que piense lo que quiera y así todos contentos.
Si os gustan las películas de terror al estilo Hollywood sin recordar que cuando erais pequeños veíais a Belén Rueda bailando en el Vip Noche, El Orfanato es vuestra peli.
1 comentario:
pues yo quiero verla, a ver si hago un hueco y me escapo al cine, jajaja, o me espero al DVD, que todo se andará, porque en casita el miedo es menos!!!!
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